Por primera vez, el gobernador Charlie Baker puso en marcha en Massachusetts «un programa de rastreo» para identificar a las persons que han estado expuestas al COVID-19 con una persona que ha dado positivo.
«Con este programa que es único en todo el país, los funcionarios de salud pública van a recopilar la información de la persona que tiene el virus y a cuántas más podría haber infectado», dijo Baker.
«Esas personas son conocidas como contactos cercanos y lo que se busca es identificar a esos contactos cercanos que podrían tener el coronavirus», subrayó el gobernador.
El nuevo programa de rastreo comunitario incluye un centro de llamadas virtual que constará de casi 1,000 rastreadores de contactos virtuales, muchos de los cuales ya se han registrado para ayudar.
El personal se comunicará con los pacientes de COVID-19 para conocer sus actividades recientes y asegurarse de que estén tomando las medidas adecuadas para mantenerse saludables y no propagar el virus.
El centro de llamadas obtendrá la mayor información posible de personas con las que se haya puesto en contacto, y las personas potencialmente expuestas serán contactadas e informadas sobre su situación y evitar así una mayor propagación.