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Envia carta abierta a La Hora del Café esta mañana, horas antes de la votación decisiva en el Revere City Council esta noche.
En primer lugar, quiero pedir disculpas por no estar presente en la reunión de hoy. Les escribo desde el estado de Arizona, donde actualmente estoy ejecutando un importante programa a nivel estatal para mi empleador.
A principios de este mes, en una reunión del subcomité, voté a favor de la derogación de la prohibición de Revere en los establecimientos de cannabis. En las semanas transcurridas desde entonces, he escuchado a cientos de residentes que han compartido sus preocupaciones. Por ello, trabajé en la presentación de enmiendas a la propuesta ante el consejo para agregar restricciones a estos establecimientos y garantizar la seguridad, la salud y el bienestar de nuestra comunidad. En caso de que el concejo vote a favor, estas enmiendas también garantizarán oportunidades económicas a pequeños emprendedores y empresarios, especialmente aquellos que son personas de color, mujeres, veteranos y personas con discapacidades interesadas en solicitar licencias de cannabis.
Mis enmiendas son de sentido común y dejan claro que estoy dando prioridad a la salud, la seguridad y el desarrollo de la juventud de nuestra ciudad. Además, he apoyado abiertamente las enmiendas de la concejala Kelly para aumentar las zonas de seguridad y garantizar que los establecimientos de cannabis sean de difícil acceso para los jóvenes. Lamentablemente, mis enmiendas en el ámbito de la salud y la seguridad fueron ignoradas.
También presenté una enmienda que crearía una vía para los históricamente marginados, como personas negras y latinas, mujeres y veteranos, también conocida como licencias de capacitación económica. Estas licencias buscan reparar las transgresiones cometidas durante generaciones contra estas comunidades mediante la creación de oportunidades económicas. Esta enmienda garantiza que, si se aprueba la ordenanza, no haya un monopolio de licencias por parte de grandes corporaciones y que las licencias no se concedan solo a los amigos y personas bien conectadas. Sin embargo, mi enmienda relativa al desarrollo económico tampoco fue tenida en cuenta.
Más que decepcionado de que estas enmiendas no se hayan añadido a la ordenanza en cuestión, ahora comparto la frustración que los cientos de miembros de la comunidad con los que he hablado han sentido en las últimas semanas. Esta frustración, que a veces se siente como impotencia, no es la de una «minoría ruidosa», sino algo demasiado común entre las personas de nuestra comunidad, que durante mucho tiempo se han sentido excluidas de los procesos de elaboración de políticas. El acceso al gobierno para nuestra comunidad es la razón por la cual me lancé para el concejo municipal. Por esta misma razón, reitero y aclaro que nadie que no sea yo y que no tenga mi autorización habla por mí; esto incluye a colegas míos.
Debido a que mis preocupaciones y las de la comunidad en materia de equidad, seguridad y oportunidades económicas fueron ignoradas durante el proceso, no puedo apoyar la ordenanza que permitiría los establecimientos de cannabis.
