Maximo Torres
Editor, El Mundo Boston
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Desde el inicio de su mandato la alcaldesa de Boston, Michelle Wu, se ha enfrentado a diversas demandas de las que ha salido airosa, incluyendo a los «diabólicos antivacunas» que le hicieron la vida de cuadritos hasta en su propio hogar donde le montaban teatritos con música y altavoces para perturbar no solo su tranquilidad sino la de sus vecinos. Wu por el bien de la comunidad en tiempos de pandemia solo pedía a los trabajadores de la ciudad vacunarse contra el COVID-19.
Pero los «antivacunas» argumentaban que les estaban violando sus derechos y religiosamente la despertaban a las 7:00 de la mañana. Eso pasó por mucho tiempo hasta que los revoltosos tuvieron que dejar de hacerlo porque una ordenanza municipal le cambió el horario para sus protestas de 9:00 de la mañana a 9:00 de la noche y allí quedaron.
La alcaldesa también se ha visto en apuros por los ataques de menores de edad contra clientes de restaurantes, peatones y compradores en pleno centro de la ciudad que llevó al Boston Herald a editorializar criticando duramente a Michelle Wu por su inacción.
La alcaldesa respondió que la ciudad estaba implementando medidas para brindar a los jóvenes el apoyo que necesitan con el fin de prevenir futuros casos de violencia. “Estos son niños que necesitan servicios y apoyo”, argumentó Wu.
Pero ahora hay un nuevo grupo comunitario local denominado “Safety of Our Schools” (S.O.S.), seguridad en las Escuelas Públicas de Boston, que está demandando a la alcaldesa Wu a tomar acción porque, según dicen en un comunicado, “en las últimas semanas se han encontrado más de 10 armas en las escuelas”.
La preocupación es evidente, después de la masacre en la escuela primaria de Uvalde, en Texas, con el terrorífico saldo de 19 niños y dos profesores muertos, ha puesto a todos en zozobra, en una alerta permanente.
La alcaldesa ha expresado repetidamente su preocupación y ha reforzado las medidas de seguridad en las escuelas, pero nada es suficiente cuando S.O.S. dice en su comunicado que “cada semana hay evidencia adicional de que tenemos una crisis de seguridad escolar en todo el sistema escolar de Boston».
La alcaldesa Wu no debe dejar pasar por alto esta voz de alerta cuando se le pide “desarrollar un plan de seguridad que se enfoque en el tema de las armas en las escuelas, los asaltos y el acoso”.
Michelle Wu ha dicho que los incidentes con armas de fuego se han “desescalado muy rápidamente” en las escuelas, pero hay que seguir en alerta y escuchar a los grupos comunitarios. Desde el inicio de su mandato, Wu ha trabajado muy de cerca con las comunidades en los diferentes vecindarios de Boston para darles seguridad. Una de las acciones más difíciles que abordó fue el desalojo de personas sin hogar y drogas en el área conocida como “Mass y Cass”. Muchos pensaron que eso no iba a suceder, pero pasó porque eran un riesgo para la salud y un peligro para los residentes y vecinos. Esa área está ahora limpia de vagabundos.
¡Sigamos cuidándonos! La vacuna salva vidas.
