Después de un intenso frío los días viernes y sábado las temperaturas dieron un giro dramático cuando las temperaturas subieron a más de 50 grados en solo 36 horas con altas
en los 40 grados al mediodía del domingo 5 de febrero.
Los meteorólogos dijeron que Boston estableció récords de las temperaturas más frías jamás medidas para un 3 y 4 de febrero.
La baja temperatura de 8 por debajo de cero el viernes rompió un récord que se había establecido en 1881. Y el sábado, la baja temperatura en Boston de 10 por debajo de cero rompió la marca récord anterior establecida en 1886.
La alcaldesa de la ciudad de Boston, Michelle Wu, había declarado en emergencia ante el embate de la helada histórica, abriendo centros de calentamiento para que las personas puedan protegerse de las bajas
temperaturas.
Los residentes en el noreste del país llegaron a percibir una sensación térmica equivalente a -46 grados Celsius a causa de esta helada. Muchas viviendas sufrieron serios daños por el frío intenso que causó la explosión de tuberías.
El Boston Medical Center se vio obligado a cerrar la sala de emergencia la noche del sábado 4 debido a que el edificio se inundó por la ruptura de sus tuberías.
Los pacientes no pudieron entrar durante varias horas mientras las temperaturas bajaban por debajo de cero. Las ambulancias tuvieron que ser desviadas a otros hospitales y los pacientes que ya estaban adentro fueron trasladados a otras partes del hospital.
