El Barcelona cuenta sus jornadas por victorias en LaLiga. Dos de dos tras visitar Valencia y recibir a un Athletic Club peleón y ansioso pero rendido al torbellino azulgrana, al que le costó trasladar el triunfo al marcador. Hasta que Robert Lewandowski arrodilló al equipo vasco y al portero mexicano Álex Padilla para colocar el 2-1 salvador. Bien merecido. Hansi Flick debió echar de menos a Dani Olmo pero, seguro, agradeció el apoyo de una hinchada que prácticamente llenó las gradas de Montjuïc (por encima de los 46 mil aficionados) y no dejó de animar al Barça.