Este año, la ciudad de Boston celebrará el Día de los muertos el 1ero. de noviembre, a las 12:30 de la tarde, en el ayuntamiento de la ciudad, todos son bienvenidos. La ciudad tendrá un altar instalado para que el público lo pueda visitar desde el día 1 hasta el 4 de noviembre.
La organización de este evento estará dirigida por Luz Johanna Pérez, la representante de los empleados Latinos de la Ciudad de Boston (Latinx ERG), junto con miembros del Consulado de México, UNAM-Boston y la comunidad mexicana.
Luz quiere hacer énfasis de cómo la Ciudad de Boston celebra el Día de los muertos y que a su vez este evento sirva para educar al público sobre el significado de este día tan importante para los mexicanos. «Quiere que se entienda que no se está celebrando la muerte, sino la vida», dice.
Luz cuenta que fue inspirada por Estela Calzada, también conocida como la mayora. Estela es de Durango, México, y vino a los Estados Unidos hace 18 años. Es madre de seis hijos y cocinera de comida autentica mexicana. Le gusta mantener y practicar mucho la tradición y cultura mexicana, particularmente el Día de los Muertos.
En su infancia, Estela veía que su madre siempre honraba a sus padres y sus suegros que habían fallecido, y, sobre todo, a un hijo (hermano de la señora Estela) que había muerto. Ese día siempre era muy especial y cuando su madre falleció, Estela quería seguir con esa tradición.
Cuando emigró a los Estados Unidos, esa nostalgia fue más fuerte y a pesar de que no contaba con los productos típicos para la celebración, tuvo que ser muy creativa para hacerlo lo más parecido posible.
«Hoy en día, en el mercado se puede conseguir una gran variedad de esos productos para poder realizar este evento, y ha reconocido que la gente quiere saber más sobre nuestra cultura».
Estela señala que el Día de los muertos es para festejar la vida. «Cuando uno muere, enterramos el cuerpo, pero el espíritu sigue vivo. Sentimos dolor por los seres queridos que han muerto y esa es la finalidad del Día de los Muertos: saber que ellos siguen vivos. Por eso se hace un altar exclusivo para ellos, con su foto, y prendemos una veladora para que haya luz y sepan que los estamos esperando y que no lo hemos olvidado. También se hace un pan exclusivamente para ellos y le tenemos flores de Cempasúchil que tienen un color y un aroma especial y que únicamente florecen en estos días en noviembre».
