- Maribel Matul-Ramírez, una mujer inmigrante guatemalteca que logró dos títulos universitarios y con su esposo es dueña de «Full Color» en Lynn.
- A la edad de 14 años emigró a los Estados Unidos huyendo de la violencia, la corrupción y la injusticia que vivía su país, venía con muchos sueños y tuvo que superar una serie de obstáculos y barreras para cristalizarlos. «El estudio es la llave del éxito y hay que ser persistentes», dice.
La historia de Maribel Matul-Ramírez, una joven madre guatemalteca que salió de su país a los 14 años de edad huyendo de la violencia, la corrupción y la injusticia, es una verdadera lección de vida. «El estudio es la llave del éxito y hay que ser persistentes», dice Matul-Ramírez que obtuvo dos títulos universitarios, uno en Ciencias de la Salud y otro en Diseño Gráfico, y ha logrado crear con su esposo una empresa de diseño gráfico llamada «Full Color» en Lynn. También es cofundadora y presidenta de la organización benéfica sin fines de lucro «His Love Foundation».
Esposa del primer concejal latino de Lynn, Obed Matul, y madre de cuatro hijos, Maribel quiere continuar su educación en medicina para «algún día brindar asistencia médica a quienes lo necesitan».
“Mi mensaje no sólo para los inmigrantes, sino para todos, porque como seres humanos todos tenemos nuestras propias metas y sueños y queremos alcanzarlos, es que tenemos que ser muy persistentes”, anota Matul-Ramírez. «A veces podemos tomarnos un descanso, pero no podemos rendirnos».
Desde que se mudó a Lynn cuando era adolescente, Matul Ramírez ha visto los cambios y la expansión de oportunidades para quienes quieren trabajar y estudiar. Su esposo ha dicho que uno de sus principales objetivos como concejal del Distrito 2 es acercar a la comunidad latina de la ciudad a su gobierno e informar mejor a las familias inmigrantes sobre las oportunidades disponibles que hay.
Sus años de lucha y sacrificio
La joven madre inmigrante compartió sus años de lucha y de sacrificio desde que salió de su casa en Tahuexco, Guatemala, para iniciar su vida en Lynn a la edad de solo 14 años.
“Mis razones para salir de mi país fueron la violencia, la corrupción y la injusticia, estábamos luchando contra la pobreza y ver la falta de oportunidades me empujó a tomar esa decisión. Dejé atrás a mi familia y a todos. Fue una decisión muy dura y dolorosa, pero lo hice porque realmente quería un futuro mejor».
«Aprendí inglés por mi cuenta»
A su llegada a Lynn, Matul-Ramírez vivió con su hermano de 19 años, Miguel Ramírez, quien había llegado seis meses antes. En su primer año, se inscribió en Lynn English High School, admitiendo que tuvo que trabajar día y noche para aprender inglés.
“En ese momento, Lynn English no tenía ningún programa para enseñar inglés a estudiantes de habla hispana, así que aprendí inglés por mi cuenta, empecé a ver dibujos animados y leía el periódico, aunque no entendía nada. Fue muy difícil, hubo momentos en que lloré porque me sentía muy perdida y confundida. Pero trabajé duro y superé esos obstáculos”.
Mientras asistía a la escuela secundaria, Matul-Rodríguez señaló que también era responsable de trabajar, pagar cuentas y asumir las muchas responsabilidades de un adulto a una edad temprana.
