La ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Paris 2024 ha causado controversia en Francia y en varias partes del mundo, la ‘innovadora’ apertura generó reacciones diversas entre la clase política francesa. «Qué vergüenza (…) La apertura de los Juegos Olímpicos es un ataque a la cultura francesa», denunció Julien Odoul, portavoz de la ultraderechista Agrupación Nacional (RN). Uno de los puntos de controversia fue la presencia de ‘drag queens’ y una niña en un cuadro artístico de la ceremonia en el que la puesta en escena hacía pensar en la Última Cena de Jesucristo con sus apóstoles. Sobre la mesa, el cantante Philippe Katerine aparecía pintado de azul y casi desnudo, con aires de Dioniso. A las críticas se sumó la conferencia episcopal de Francia, por las escenas de «mofa del cristianismo, que lamentamos muy profundamente».