Julia Mejía, Concejal At-Large de la ciudad de Boston Apoyando a los negocios latinos y la comunidad

Iniciativa en tiempos de pandemia que está ayudando a muchas personas de nuestra comunidad, especialmente de la llamada Tercera Edad, bodegas y restaurantes de propiedad de mujeres y de personas de color.

Tendiendo la mano. En tiempos de coronavirus, la Concejal At-Large de la ciudad de Boston, Julia Mejía, que coronó su triunfo con un solo voto en las pasadas elecciones municipales y que lo recuerda a flor de piel con humildad y orgullo, se ha lanzado a la tarea de ayudar a las personas mayores o de la llamada Tercera Edad dándoles comida que refleje “nuestra cultura” y al mismo tiempo apoyar con la compra de los alimentos en bodegas y restaurantes latinos que están siendo afectados por el COVID-19.

“Como presidenta del Comité de Desarrollo de las Pequeñas Empresas y la Fuerza Laboral, nuestra oficina ha escuchado historias de cómo el COVID-19 está afectando a nuestras pequeñas empresas, especialmente aquellas que son propiedad de mujeres y de personas de color. Estas historias, junto con mi propia experiencia vivida creciendo en la pobreza, nos han inspirado para asociarnos con Determined Divas, una organización local de compromiso cívico, y Paola García, de Tufts Health Plan, para proporcionar comida a las personas mayores en Boston”.

“Creamos esta iniciativa para garantizar que nuestros restaurantes locales puedan continuar prosperando, mientras que servimos a nuestros mayores comidas culturalmente nutritivas”, subraya Julia Mejía, la primera mujer Latina y de color en el Cabildo Metropolitano de Boston.

“Desde que me senté en el sillón municipal a comienzos de año he levantado la voz para apoyar a nuestra comunidad, el coronavirus nos vino a sacar a todos, celebramos sesiones virtuales, pero no puedo dejar de trabajar para mi gente y estoy desarrollando proyectos para mejorar nuestras vidas en estos tiempos de pandemia”, anota Mejía.

Desde marzo pasado cuando se ordenó el cierre de los centros de envejecientes, muchas personas mayores de origen latino se quedaron virtualmente sin ningún tipo de atención y mucho menos de alimentación. Ese es el caso de “Villa de la Alegría” en West Roxbury que brindaba servicio a casi 300 envejecientes que incluían desayuno, almuerzo y refrigerio.

“A esas personas mayores estamos llegando con los alimentos que usamos los latinos para cocinar y comer”, dice Mejía, al mismo tiempo que ponen atención en ayudar a las bodegas locales y a los restaurantes en los diferentes distritos de Boston con las compras.

Con el apoyo de miembros de Tufts Health Plan, la concejal Mejía llegó hasta centros de envejecientes en Charlestow y Jamaica Plain llevando no solo alimentos a los ancianos sino serenatas al pie de los edificios con el reconocido músico colombiano, Jorge Omar, para alegrarles el día.

“Trabajar con la concejal Mejia, ayudando a identificar los lugares y las diferentes culturas para   llevarles alimentos, es muy gratificante. Porque es ver en sus rostros el agradecimiento de saber que son importantes. Se han beneficiado de la ayuda hasta el momento unos 1300 envejecientes latinos, haitianos, asiáticos, afroamericanos y anglosajones en Hyde Park, Dorchester,  Roxbury, East Boston, Charleston,  South End, North End”, subraya Paola García, reconocida activista Latina que trabaja para Tufts Health Plan apoyando a las personas mayores con un seguro de salud.

“Durante este tiempo de tanta incertidumbre es importante cuidar de nuestros envejecientes y la Concejal Mejía está muy identificada con el programa que ha creado Tufts para apoyar a nuestros adultos mayores”, anota.

Con la máscara o tapaboca, la Concejal Latina se encargó de llevar las compras de alimentos a los diferentes hogares en necesidad y de participar activamente en los distintos almacenes de alimentos (Food pantry).

“Amo, mi trabajo”, dice Paola García. “Porque cuando tienes una compañía que te apoya, y organizaciones que trabajan en conjunto para ser solidarios por una causa, puedes lograr mucho más. Es importante, recordar que nuestros adultos mayores abrieron el camino a muchos de nosotros para estar donde estamos hoy en dia, porque cada uno de ellos dejó una huella”.

También entregaron almuerzos, máscaras y desinfectantes donados por Gloria Dávila, directora de una Vida Perfecta y Balanceada.

La Concejal At-Large que es originaria de la República Dominicana se muestra solidaria con las personas mayores. “Desde que asumí el cargo me he enfocado en todo lo que tiene que ver con la comunidad inmigrante y ahora con la pandemia me propuse ayudar a nuestros envejecientes y a los pequeños negocios latinos que tenemos que seguir apoyando”.