- Familiares y activistas de diferentes organizaciones salieron a las calles para buscar la reacción de la comunidad y evitar la deportación de Marcos Flores, quien fue víctima de abuso sexual cuando niño, dio muerte a su abusador, pagó su condena de 15 años y “ahora no es justo que lo quieran deportar”, dice su sobrina Karina Flores en “La Hora del Café” de El Mundo que se transmite de lunes a viernes, a las 7:00 de la mañana, por las redes sociales.
«La Hora del Café» de El Mundo Boston, uno de los programas locales más seguidos por la comunidad en las redes sociales, se convirtió en caja de resonancia de un caso por demás humano. «Justicia para Marcos» se lee en una gran pancarta. Su sobrina Karina Flores, una joven salvadoreña que busca una maestría en servicio social en Boston University, habla del caso de su tío Marcos Flores y dice «no es justo que lo quieran deportar».
«Mi tío ha sido una víctima de abuso sexual por una persona que lo cuidaba cuando era niño», subraya Karina quebrada por la emoción. «Mi tío no se merece la deportación».
Marcos Flores emigró de El Salvador a la edad de seis años para reunirse con su mamá y su tía abuela, «tenía una infancia feliz hasta que a los 9 años una persona que lo cuidaba lo violó y comenzó el abuso sexual hasta los 14 años. Su mamá tenia que trabajar en dos trabajos como todos los inmigrantes para poder subsistir y dejaba a su hijo al cuidado de su vecino sin siquiera imaginarse que era un abusador de niños», cuenta Karina.
Marcos vivió un verdadero infierno con su abusador y reaccionó a los 16 años cuando el mismo individuo intentó hacer lo mismo con su primo, hermano de Karina, dándole muerte. La justicia lo condenó a 15 años de prisión y le dieron libertad a los 13 años por buena conducta, pero las autoridades carcelarias lo entregaron al Servicio de Inmigración para ser deportado.
«Es injusto lo que quieren hacer, mi tío fue la víctima de abuso sexual y ya cumplió su condena y lo deben dejar libre», sentencia Karina.
«Esta es una historia que nos toca el corazón»
El caso de Marcos Flores ha llamado la atención de toda la comunidad. «Esta es una historia muy triste que nos debe tocar el corazón a todos», señala Sandra Nijjar de East Boston Community Soup Kitchen, una de las organizaciones que ha salido en apoyo de Marcos.
«Sabemos que este no es el único caso, sabemos que hay otros niños que han sido abusados y por eso hacemos este llamado a todos los miembros de nuestra comunidad para hacer que las autoridades migratorias dejen en libertad a Marcos».
«Este muchacho no ha tenido justicia, a él lo castigaron con la cárcel por haberse defendido de un monstruo, de un ofensor sexual y por haber protegido a su sobrino pequeñito del mismo abusador que le había quitado su niñez, su infancia por el resto de su vida», anota Sandra, quien conoce el caso desde sus inicios.
La conocida activista cuenta que Marcos ha recibido ayuda emocional para poder superar todo el trauma que ha sufrido.
«Nos estamos uniendo para que no lo deporten»
«Nosotros como inmigrantes nos estamos uniendo para que no lo deporten, este es otro castigo que quieren darle, ahora está en manos de Inmigración y no lo sueltan, le dan fechas de audiencia falsas y le están dando más abuso sicológico», relata Sandra.
Frente a Maverick Station en East Boston, familiares y activistas reclamaron «Justicia para Marcos», quien en un acto de legítima defensa dio muerte a su abusador sexual de quien las investigaciones encontraron evidencias de que era un abusador sexual de niños. «Marcos dio muerte a un monstruo», dice la activista.
Por su caso Marcos Flores perdió su Estatus de Protección Temporal conocido como TPS y puede ser deportado.
Su sobrina Karina cuenta que en los últimos días ha hablado con su tío, se siente preocupado y conmovido por el apoyo que está recibiendo de la comunidad. «Marcos merece justicia para sanar de tanto abuso, la mamá confió en esa persona, era una madre soltera que tenía que pagar todo para poder subsistir, es una historia muy común entre nuestros inmigrantes y los niños terminan pagando un precio tan duro como este, porque las personas en que uno más confía terminan destruyéndoles la vida por completo».
«Tenemos que parar esto y ayudar a nuestros niños, muchas familias no pueden pagar un centro de cuidado de niños con licencia y confían en cualquier persona y ese es el riesgo que corremos», concluye Sandra.
Marcos Flores tiene audiencia en la Corte el 8 de febrero y la comunidad espera que no lo deporten y se quede a vivir con su mamá.
Algo Más
«Hay que proteger a nuestros niños, conozco este caso desde que pasó y le he pedido a Dios que no permita que más injusticias pasen. Marcos es uno de los tantos niños abusados sexualmente y lo más inhumano sería que lo deporten a su país que no conoce porque salió a los seis años de edad, lo que pedimos es justicia para Marcos»: Sandra Nijjar.
