Maximo Torres
Editor, El Mundo Boston
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Después de meses de vivir bajo la hoguera, encerrados, en cuarentena por ese diabólico coronavirus que aún nos sigue atacando sin piedad, dejando en el camino a millones de personas o en el mejor de los casos viviendo en la angustia de caer en esta “guerra bacteriológica”, llegamos a la Navidad, a este tiempo de paz, de amor a Dios y a nuestros semejantes con la bendita vacuna como regalo de Papa Noel y vemos ángeles como caídos del cielo y a los verdaderos héroes latinos que en estos tiempos difíciles nos han dado la mano para no perecer, para no morir de hambre porque muchos de nuestros trabajadores perdieron sus trabajos y no sabían qué hacer. Son muchas las personas que sin importarles el riesgo que corrían de contraer el virus se entregaron de lleno al servicio de los que necesitaban de su ayuda. Los nombres de nuestros héroes se pueden multiplicar, pero ahora quiero hacer mención especial y dedicar esta columna a Gladys Vega, una de las activistas de origen puertorriqueño más reconocidas y queridas no solo en Chelsea, la ciudad que la vio crecer, sino en todo Massachusetts.
Gladys Vega, directora de la Colaborativa, es la “Bostoniana del Año” reconocida por The Boston Globe. Es nuestra heroína por todo su indesmayable trabajo para llevar el alimento diario a miles de familias latinas. Desde el inicio de la pandemia, su trabajo trascendió fronteras y logró recaudar en donaciones más de 160,000 dólares para comprar en los supermercados locales y entregar a cada una de las familias bolsas de alimentos para que no pasen hambre. Gladys Vega hizo un trabajo enorme movilizando a sus empleados y a decenas de voluntarios.
Pero como Gladys Vega hay muchas otras y otros héroes en nuestra comunidad que también han librado sus propias batallas para llegar con comida a muchas más familias en una comunidad como la nuestra que es la más golpeada por esta terrible pandemia. Guatemaltecas como Vilma Gálvez, Patricia Sobalvarro y Damaris López de ALPHA, dominicanas como Patria Sánchez de LULAC Evolution y Magalis Troncoso del Centro de Desarrollo Dominicano, salvadoreños como Lucy Pineda de LUMA, Antonio Amaya de la Comunidad Inc. y Tony Portillo, empresario y presidente del Carnaval Salvadoreño de Boston, colombianos como Paola García de Tufts Health Plan que se las inventó para llevar alegría a los asilos de ancianos con la música de uno de los cantantes locales como Jorge Omar. Todos ellos merecen nuestro reconocimiento y no quiero dejar pasar por alto a Dulce González, una joven estudiante universitaria de origen guatemalteco que se entregó también de lleno con un grupo de voluntarios para ayudar desde Salvation Army a muchas familias de Lynn que no tenían el pan de cada día.
Son muchos los héroes que hay en nuestra comunidad y por eso El Mundo Boston y Tufts Health Plan con su lema “Presentes por nuestra gente”, se han unido para premiar a todos los latinos, médicos y todo el personal de salud, incluido a los que trabajan en mantenimiento, policías, bomberos, trabajadores de supermercados, de asilos de ancianos y otros que han marcado la diferencia durante este año pandémico del 2020. Para ello, están pidiendo a la misma comunidad que nomine a sus “Héroes de la Pandemia”. Muchos de ellos han experimentado en carne propia los embates de la enfermedad y otros han sufrido la perdida de sus seres queridos.
El espíritu navideño va de la mano del clima pandémico, el gobernador Baker y el alcalde de Boston, Marty Walsh, han hecho los máximos esfuerzos sanitarios para no seguir sumando el número de infectados que ya superó los 300,000 desde el inicio de la pandemia.
Lo que nos queda es celebrar a nuestros héroes latinos tomando muy en cuenta esta nueva ola de contagios, no es momento de dar la espalda al coronavirus y entregarnos a una Noche Buena sin límites y sin respetar los protocolos de salud. Las reuniones deben estar limitadas al núcleo familiar sino queremos ver un mayor y peligroso rebrote que lleve a las autoridades del gobierno y de la alcaldía a cerrar Massachusetts. Es hora de que todos pongamos de nuestra parte.
¡Sigamos cuidándonos!
