Por Brendan O’Brien – (MINEÁPOLIS, 1 Junio) (Reuters) – Una madre blanca envolvió con fuerza con su brazo la espalda de su hijo adolescente negro mientras contemplaban un homenaje improvisado a George Floyd en el lugar donde fue asesinado por la policía.
Poco después, Tenzing Walker, de 14 años, colocó en el suelo una tarjeta dirigida a Floyd que decía «Siempre serás recordado, seguiremos luchando por ti» afuera del supermercado Cup Foods, donde ocurrió el hecho hace exactamente una semana.
Walker y su madre fueron algunas de las cientos de las personas que se congregaron en un lugar cargado de emociones en un cálido y soleado lunes para presentar sus respetos a Floyd. Los participantes rezaron, se abrazaron y colocaron ramos de flores y carteles con leyendas como «No puedo respirar» y «Justicia para George Floyd».
«Esto es increíble. Es una muestra de amor. No importa qué suceda, esto nos demuestra que, como comunidad, podemos unirnos», dijo Reginald Ferguson, director de un programa local orientado a la juventud que entregó comida gratis y artículos de aseo personal a quienes lo necesitaran.
Los niños usaron tizas de colores para escribir sentidos mensajes a Floyd en el pavimento mientras voluntarios repartían comida enlatada, pañales y botellas de agua.
Un video mostró que un oficial de policía blanco puso su rodilla en el cuello de Floyd durante casi nueve minutos antes de que el hombre muriera. El crimen ha provocado días de protestas, en ocasiones violentas, contra la desigualdad racial y la brutalidad policial en varias ciudades de Estados Unidos.
En el lugar exacto donde murió Floyd, su hermano Terrence se arrodilló y lloró, en una imagen que contrasta con los desmanes y saqueos que han sacudido a Estados Unidos.
«Cambiemos y hagamos esto pacíficamente», dijo Terrence Floyd a través de un megáfono a los asistentes, a los que rogó que voten.
(Reporte de Brendan O’Brien en Chicago. Editado en español por Rodrigo Charme)
