- ¿Son por salud mental?
- ¿Qué lleva a los jóvenes a perpetrar tiroteos masivos?
- ¿A quién o a quiénes culpar?
Aún, a días del tiroteo en una escuela primaria de Texas que costó la vida de 19 niños y dos profesores, muchos se preguntan ¿si las enfermedades mentales son la causa principal de la violencia o de los tiroteos masivos en las escuelas o en cualquier otro lugar? Muchas personas, incluido los políticos dicen que sí, incluso el gobernador de Texas, Greg Abbott, atribuyó el ataque a una enfermedad mental y no a las leyes de armas indulgentes.
“Ningún pistolero que comete estos actos de horror es una persona mentalmente sana, pero culpar a la enfermedad mental como la causa de los tiroteos en masa fundamentalmente no está respaldado por pruebas de casos ni por estudios científicos”, dijo Mark Follman, periodista y autor del nuevo libro “Trigger Point” en el que aborda la misión para detener los tiroteos masivos en Estados Unidos.
“No surgen de la nada. No son solo los locos los que están matando. No es un acto impulsivo. Nada de eso es cierto».
Los expertos lo atribuyen al agravio, la desesperación o la ira que, según dicen, pueden ser los desencadenantes más probables que las enfermedades mentales.
“Cualquiera que le dispara a otra persona tiene un problema de salud mental”, según Abbott, aunque reconoció que el joven que perpetró la matanza en la escuela de Uvalde no tenía antecedentes penales ni de salud mental documentados. “Nosotros, como gobierno, debemos encontrar una manera de abordar ese desafío de salud mental y hacer algo al respecto”.
Claramente, nadie que cometa asesinatos en masa está mentalmente bien o emocionalmente estable. Pero la suposición de que la enfermedad mental engendra o predice actos atroces de violencia es falsa, según expertos en tiroteos escolares y violencia masiva.
Los expertos señalan que el deseo de muerte y destrucción de los tiroteos masivos se deriva de una variedad de circunstancias y tiene sus raíces en agravios, desesperación e ira arraigados, independientemente de si experimentan síntomas de enfermedad mental.
Los tiroteos masivos en los Estados Unidos representan menos del medio por ciento de todos los homicidios y, por lo tanto, es difícil estudiarlos o llegar a conclusiones firmes. Las motivaciones de los autores también son difíciles de analizar porque muchos mueren en el lugar de sus ataques y no dejan nada que explique sus acciones. Pero la investigación ha demostrado que el vínculo causal entre la enfermedad mental y la violencia masiva es tenue.
“La edad, las redes sociales, el acceso a las armas de fuego, los antecedentes de violencia, el consumo de sustancias, generalmente predicen mucho más la violencia que un diagnóstico de enfermedad mental”, dijo Jonathan Metzl, director del Departamento de Medicina, Salud y Sociedad de Vanderbilt. “De hecho, un diagnóstico de enfermedad mental predice [ser víctima de] violencia”.
Puntos claros
- “Los tiroteos en masa suelen ser ejecutados por jóvenes, que canalizan su dolor y su ira a través de actos de violencia y agresión. Para muchos de ellos, su camino hacia la violencia comienza con un trauma en la primera infancia.
- ”A menudo comparten un sentido de ‘derecho’ a la riqueza, el poder, el romance y el éxito. Cuando no logran esos objetivos, se enfurecen y buscan un chivo expiatorio”.
- “Los pistoleros escolares culpan a sus escuelas. Algunas personas culpan a un grupo racial, a las mujeres, a un grupo religioso o al lugar de trabajo”.
- “Pero la enfermedad mental, rara vez es un motivo exclusivo para los que ejecutan tiroteos masivos”. (Sicóloga forense Jillian Peterson, cofundadora de The Violence Project, un grupo de expertos dedicado a reducir la violencia).
