El Real Madrid ganó, goleó, pero no gustó. Al menos no del todo. 3-0 en casa ante el Valladolid, con un Kylian Mbappé errático que no pudo presentarse ante el Bernabéu con anotación y que finalmente fue sustituido. El primer tiempo no respondió a las expectativas generadas con un estadio Santiago Bernabéu expectante por la presentación en casa de Kylian Mbappé, quien en dicho periodo sólo conectó un remate tras pase largo de Rüdiger, el cual fue contenido por el guardameta. Nada más que contar, en un encuentro muy cerrado con un visitante bien parado atrás y los merengues carentes de ideas para buscar ofender y llegar a líneas finales por los costados.