Carlos Cardoso, dueño de una escuela de manejo de Brockton, está comprometido hasta los huesos en un delito de graves consecuencias. Según fiscales federales, Cardoso pagó miles de dólares a un examinador de exámenes prácticos de Massachusetts para aprobar falsamente a varias personas que solicitaron licencias de conducir.
Cardoso fue arrestado por las autoridades bajo cargos del gran jurado de fraude postal y conspiración por servicios deshonestos.