Sin castigar «crimen de odio»

Juez desata críticas por sentencia leve contra mujer blanca que golpeó y pateó a madre e hija por hablar español en East Boston.

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  • ”Habla inglés, vives en los Estados Unidos sino regrésate a tu país para que hables español”, les decían mientras las golpeaban. La otra agresora aún no recibe sentencia.
  • La madre de apellido Vásquez dice que desde la agresión “han evitado hablar español en público porque tememos ser atacadas”.

La leve sentencia de un juez de la Corte de East Boston contra una persona blanca acusada de agredir a una mujer y su hija adolescente por hablar español significa que “el tribunal enfrentó el racismo y la intolerancia con indulgencia y tolerancia”.

“El hecho de que la corte no haya impuesto un servicio comunitario significativo subraya lo lejos que el sistema judicial aún tiene que llegar para manejar adecuadamente los crímenes de odio en un momento en que las tensiones raciales están en su punto más alto”, subraya en un comunicado Myraida Meléndez, miembro de Abogados por los Derechos Civiles que quería una sentencia más severa que incluyera servicio comunitario.

Los fiscales habían buscado resultados de culpabilidad por dos cargos de asalto y agresión, dos cargos de violación de los derechos civiles y un cargo de asalto y agresión con un arma peligrosa, y una sentencia de dos años de libertad condicional.

Sin embargo, el Juez de la Corte de East Boston ha sido demasiado indulgente contra la agresora pese a continuar el caso sin encontrar un fallo desde que ocurrió lo que se llamó «crimen de odio» en febrero del 2020.

Según Abogados por los Derechos Civiles que brinda asistencia legal a las víctimas, Jenny Leigh Ennamorati admitió hechos suficientes para cinco cargos en relación con el incidente ocurrido en las calles de East Boston, uno de los distritos de Boston donde viven muchos inmigrantes latinos.

La sentencia del juez significa que «los cargos podrían ser desestimados si Ennamorati cumple con las condiciones de la libertad condicional», señala la oficina del fiscal de distrito de Suffolk en un comunicado.

“Las acciones violentas y el comportamiento odioso y racista que esta persona admitió no tienen cabida en nuestra sociedad. Mi oficina ha estado en contacto cercano con las víctimas en este caso y continuará brindándoles apoyo a ellas y a la comunidad de East Boston”, indica el fiscal de distrito Kevin Hayden en otro comunicado.

Las agresoras gritaron a sus víctimas, una mujer de 46 años y su hija de 15, identificadas solo con el apellido de Vásquez: «Esto es Estados Unidos, hablen inglés o regresen a su país», mientras las golpeaban, pateaban y mordían.

Vásquez en una conferencia de prensa en Centro Presente con abogados de la organización había señalado que fueron atacadas sin provocación cuando se dirigían a su vivienda después de una cena para celebrar su cumpleaños.

Las agresoras, dos mujeres blancas, dijeron a la policía que pensaban que la madre y la hija se estaban burlando de ellas en español, admitiendo que habían estado bebiendo.

La madre y la hija han declarado que la agresión por hablar español les ha causado un gran daño emocional.

“Debido a este ataque, soy reservada, tímida y tengo miedo de hacer nuevos amigos. Tengo miedo de que puedan escuchar mi acento y acosarme”, según expresó la hija.

La madre Vásquez ha ratificadoo que desde la agresión “han evitado hablar español en público porque tememos ser atacadas”.

Los cargos contra la otra mujer acusada de agresión aún siguen pendientes.