Un recién llegado de Venezuela condenado por asesinato en su país natal, fue arrestado por agentes locales de Inmigración mientras vivía en un refugio para migrantes en Cape Cod.
Pero pudo cruzar la frontera en julio y terminó en una vivienda estatal de refugiados en una base militar en Cape Cod.
Según los récords de inmigración, López nunca reveló su anterior condena por homicidio a los oficiales norteamericanos cuando lo arrestaron por entrar ilegalmente en los Estados Unidos en Texas, el pasado 31 de julio.
Sin embargo, los agentes federales lo dejaron pasar al país con una orden de comparecencia en las oficinas de ICE en un plazo de 60 días, lo cual López nunca hizo. La semana pasada fue arrestado en una residencia financiada por los contribuyentes de Massachusetts.
«Los ciudadanos de Massachusetts tienen el derecho de saber de cualquier riesgo de seguridad pública, especialmente cuando se trata de una persona que está aca ilegalmente, viviendo en refugios proporcionadas por el Estado,” dijo el director de la Oficina de Campo de ERO Boston, Todd M. Lyons en un comunicado.
