Por Maximo Torres
- Con el régimen de excepción, el presidente Bukele acabó con la más peligrosa banda de delincuentes y terroristas llamada “Maras Salvatruchas” que prácticamente dirigían el país.
No hace mucho, mi buena amiga Lucy Pineda, directora ejecutiva de Latinos Unidos de Massachusetts (LUMA, me hablaba entusiasmada de su viaje a El Salvador, a su Pulgarcito de América que ahora vive, goza por la tranquilidad que se respira en esa nación centroamericana. Los tiempos del país más inseguro del mundo ya son cosa del pasado. Ahora El Salvador «es el país más seguro del mundo».
La guerra que el presidente Bukele declaró hace poco menos de un año contra la delincuencia, contra los terroristas pandilleros que tenían al país bajo el terror, han dado resultados para felicidad del pueblo salvadoreño. Viajar antes a El Salvador era un peligro, por las calles encontrabas a las pandillas extorsionando no sólo a dueños de negocios sino a cualquier mortal que recibía una remesa de dinero de sus familiares del exterior. Si alguien se oponía aparecía muerto, en una bolsa y no pasaba nada. Los homicidios, el robo, la extorsión eran el pan de cada día.
Ahora los tiempos han cambiado, en El Salvador se respira tranquilidad, es el país más seguro, la gente ya puede caminar por las calles sin ningún temor gracias al régimen de excepción que le permitió al presidente Nayib Bukele ejecutar su Plan de Control Territorial y capturar a más de 60,000 pandilleros y personas relacionadas con los movimientos terroristas.
«La gente no tiene miedo al régimen de excepción como dicen algunos medios internacionales o algunas ONG, la gente está feliz y eso no lo decimos nosotros sino la misma gente en las calles», dice Bukele.
Con 10,000 efectivos de las Fuerzas Armadas y policiales en distintos puntos del país, el presidente salvadoreño ha acabando con el terrorismo y la delincuencia. Su Plan de Control Territorial en su fase 5 está permitiendo capturar a los terrorista que aún quedan en el país. «Son pocos, pero hay que detenerlos y no hay que darle lugar a que escapen», es la orden de Bukele que le ha devuelto la tranquilidad a los salvadoreños.
Los que viven en el exterior como Lucy Pineda que visita su país después de un tiempo nos lo dice. «Por todos lados donde uno va la gente se siente segura, ya no hay el miedo de antes a las pandillas y delincuentes», dice.
La orden del presidente es acabar con el terrorismo, con la delincuencia de las pandillas y ya no es raro ver el desplazamiento de 10,000 efectivos, casi el 70 por ciento de los militares que tiene el país, rodear una ciudad completa para capturar terroristas y liberar a la población del terror. Nadie entra ni sale sin pasar por un control de seguridad y eso forma parte de la guerra contra las pandillas.
Hasta poco antes del régimen de excepción habían 30 muertes diarias y era común encontrar cadáveres en las calles. «Vean cuántos homicidios hay ahora, semanas, meses sin homicidios», dice Bukele orgulloso del accionar de las Fuerzas Armadas y Policiales. Pero hay quienes lo acusan de violar los derechos humanos.
«El crimen ha bajado y puedes ir por las calles y es ahora super seguro». Lucy Pineda lo vive y siente que el 85 por ciento de la población apoya al presidente Bukele que es más que seguro gane la reelección.
¡Sigamos cuidándonos! La vacuna salva vidas.
Maximo Torres
Editor, El Mundo Boston
