Es hora de votar

No es tiempo de llorar después

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Maximo Torres
Editor, El Mundo Boston
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Hay mucho en juego en estas elecciones y lo que me decía una amiga que nos sigue por las redes sociales «no repitamos la misma historia. Salgamos a votar». ¿Por qué me lo decía? Porque todavía somos la comunidad que menos ejerce el derecho al voto en elecciones intermedias y es una vergüenza. En los últimos años hemos crecido no solo en población sino con derecho a sufragar. Somos más lo que nos hemos hecho ciudadanos en las últimas dos décadas, pero no votamos por desidia, dejadez o por lo que fuera.

Es hora de cambiar, de dejar de llorar después de una elección. Porque al final de cuentas somos los latinos los más afectados sino votamos.

En Massachusetts vivimos 800,000 latinos, de los cuales hay un gran porcentaje que es residente legal por 10, 15 y 20 años que no se ha hecho ciudadano. Este es otro problema y en Lawrence, una de las comunidades más latinas, las autoridades migratorias con el alcalde dominicano Brian de Peña, van a revelar en septiembre próximo los números de ¿cuántos residentes legales pueden hacerse ciudadanos? en el marco de una campaña de naturalización.

Ahora todos los que hemos jurado bandera por este país de las oportunidades debemos salir a votar para no quejarnos de que somos la población más desatendida. Las primarias están a la vuelta de la esquina, el 6 de septiembre, y las generales en noviembre.

Si bien El Mundo Boston no es partidario de endosar a ningún candidato a un puesto político a diferencia del Boston Globe que si lo hace, nosotros alentamos a todos nuestros electores a cumplir su deber ciudadano. No importa por quien lo haga, solo le pedimos que vote.

Nosotros abrimos cada semana nuestras páginas a todos los políticos, sin excepción, para que animen a sus electores. Ya es tiempo de figurar como una de las comunidades que más ejerce su derecho al sufragio.

Nuestros candidatos latinos merecen nuestro apoyo como Marcos Devers, nuestro Representante estatal en Lawrence que va a la reelección, o Domingo Domínguez, dominicano, y Manny Cruz de padres dominicanos que van por un escaño en la Cámara de Representantes por Salem. Uno de los dos va a ganar.

En estas elecciones también se verá quien es el nuevo gobernador. La Fiscal general Maura Healey, amiga de nuestra casa, es la candidata demócrata con todos los pergaminos para gobernadora de Massachusetts, tenía antes como contendiente a la Senadora latina Sonia Chang-Díaz, que renunció a sus aspiraciones.

Ahora Maura se perfila como favorita para ganar las elecciones y suceder al gobernador republicano, Charlie Baker, quien pese a gozar del apoyo de la población decidió no postularse para un tercer mandato.

Pero al margen de nuestras inclinaciones por uno u otro candidato ¿Qué es lo que nos debe preocupar y por qué debemos salir a votar? Los que se oponen a que se les de licencias de conducir a los inmigrantes sin papeles han logrado reunir las firmas necesarias para incluir una pregunta en la boleta electoral para derogar la Ley de Movilidad Laboral y Familiar que fue aprobada por las dos Cámaras legislativas con amplia mayoría.

La coalición que apoya la ley va a organizar una campaña para educar a nuestros electores a que voten «SI’ en las elecciones generales de noviembre. De allí la importancia de que todos los que nos hemos hecho ciudadanos americanos salgamos a votar porque al margen de cualquier consideración creemos que la ley aprobada por la legislatura es el triunfo de una lucha de casi 20 años y es a todas luces justa. Es una ley que recibió como nunca antes, el apoyo de todos los sectores, incluyendo la policía.

De allí que nuestro amigo Dominico Cabral, ex cónsul dominicano en Boston y presidente de la Seccional del partido «Fuerza del Pueblo» del expresidente dominicano Leonel Fernández en Nueva Inglaterra, está cumpliendo una loable labor al promover el voto y lo vemos en la foto con un grupo de amigos y simpatizantes con un gran cartel que dice: «Dominican-American vote of Massachusetts-Boston USA». Este es el ejemplo que debemos seguir.

¡Sigamos cuidándonos! La vacuna salva vidas.