Goya, Trump y la libertad de expresión

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Todo comenzó la tarde del jueves 9 de julio en el Jardín de las Rosas en la Casa Blanca cuando el presidente y CEO de Goya Foods, Robert Unanue, anunció una importante donación de alimentos de un millón de latas de garbanzos cultivados en Estados Unidos y un millón de libras en productos diversos a bancos de alimentos en todo el país. Hay una angustiosa necesidad de ayudar a familias afectadas por la pandemia del COVID-19.

Unanue aprovechó la oportunidad para comentar sobre el liderazgo del presidente Trump y dijo: «Todos somos verdaderamente bendecidos de tener un líder como el presidente Trump que es un constructor … Oramos por nuestro liderazgo, nuestro presidente y oramos por nuestro país».

Ese comentario enfureció a muchos de los que se oponen a Trump por diversas razones que abordaremos más adelante.

El viernes por la mañana, Twitter y otras redes sociales explotaron con el hashtag #BoycottGoya llamando a los latinos a boicotear los productos Goya debido a los comentarios de Unanue.

Al día siguiente, Unanue apareció en la televisión nacional diciendo que «no se disculpaba» por elogiar al presidente Donald Trump en la Casa Blanca.

Unanue hizo lo mismo con Obama

El CEO de Goya señaló que hubo un doble estándar en la reacción a sus comentarios complementarios sobre Trump, y señaló que aceptó una invitación de Barack Obama sin reacción similar y calificó el movimiento de boicot como una «represión del discurso».

Poco después de que la tendencia #BoycottGoya estallara en Twitter, fue contrarrestada por una tendencia #BuyGoya.

Para aquellos que no están completamente familiarizados con Goya Foods, es la compañía de alimentos hispana más grande de Estados Unidos y una marca icónica en la comunidad latina desde 1936, cuando fue fundada por inmigrantes españoles en la ciudad de Nueva York.

«Si es Goya, tiene que ser bueno»

Su línea de productos presenta más de 2,500 productos alimenticios del Caribe, México, España, América Central y del Sur vendidos en tiendas, bodegas y cadenas de supermercados en los mercados continentales de los Estados Unidos, Puerto Rico e internacionales.

El credo registrado de la compañía, “Si es Goya, tiene que ser bueno”, se ha convertido en parte del léxico latino en Norteamérica. Durante al menos tres generaciones, la compañía ha sido clasificada como una de las compañías privadas más grandes de Estados Unidos por la revista Forbes.

Sus comienzos, ascenso y éxito se han anunciado como un gran ejemplo del «sueño americano», donde una pareja de inmigrantes, establecida en Nueva York, tomó una idea y se convirtió en una empresa estadounidense que emplea a más de 4,000 empleados y tiene una larga historia de apoyo a los latinos. Sus esfuerzos caritativos están a un nivel que pocos pueden igualar.

Toda una historia de ayuda

En marzo y abril de 2020, en respuesta a la pandemia de Coronavirus, Goya donó más de 300,000 libras de alimentos, o alrededor de 270,000 comidas a bancos de alimentos y otras organizaciones en los Estados Unidos y donó más de 20,000 máscaras protectoras, continuando con su larga historia de esfuerzos caritativos.

Un simple vistazo rápido a su página de inicio de Goya Gives muestra un historial de donaciones de millones de libras de alimentos a víctimas de diversos desastres en todo el mundo, incluidos el huracán Sandy, Isaac, Harvey, Irene y María, así como el terremoto en Haití. Apoyan a cerca de 300 proyectos de caridad, programas, becas y eventos, así como a orfanatos en la República Dominicana y Colombia.

Hasta el jueves por la tarde y de eso estoy seguro, la mayoría de los latinos en los Estados Unidos había adoptado plenamente los productos, la marca y su compromiso de retribución, especialmente en momentos de grandes desastres y necesidades.

La manzana de la discordia

Sin embargo, los comentarios que Unanue hizo alabando a Trump no sólo enfureció a muchos estadounidenses que están hartos del presidente, sino a los que están dentro de su base de clientes que lo ven como una bofetada descarada.

No es ningún secreto que la mayoría de los latinos en los Estados Unidos ven a nuestro actual presidente con desdén. Incluso en 2016 cuando ganó, el 72% de los latinos votaron en contra de él y, desde su cargo, Donald Trump ha hecho casi todo lo posible para insultar a los hispanos.

El trato del presidente a los inmigrantes en la frontera es visto como brutalmente inhumano y ferozmente impopular entre los latinos.

Sus intentos de rescindir DACA, un programa que protege contra la deportación y otorga permisos de trabajo a casi 700,000 inmigrantes indocumentados respetuosos de la ley que llegaron a los Estados Unidos cuando eran niños, se consideran particularmente siniestros.

Y su cambio de política más reciente de revocar visas de estudiantes internacionales cuyas clases universitarias se mueven completamente en línea este otoño se ha considerado «inquietante y cruel», lo que hace que las universidades rechacen con demandas legales.

En fuego cruzado

Como pueden ver, cualquier marca que se asocie con esta vara de un presidente lo hace bajo su propio riesgo. Y ahí es donde nos encontramos con Goya, una marca históricamente querida que ahora se encuentra en el fuego cruzado de aquellos que están realmente molestos con Unanue y aquellos que argumentan que Unanue tiene derecho a su opinión personal y que el apoyo inigualable de Goya a la comunidad por mucho tiempo debe ser el verdadero palo de medición para esta empresa.

Todo parece simple, pero la decisión es suya. Todavía vivimos en un país que nos brinda la oportunidad de expresar nuestros sentimientos en las urnas, en las redes sociales y en la caja registradora.

El Mundo Boston Facebook abrió su plataforma a los comentarios porque creemos que hay una amplia gama de opiniones. El Mundo Boston solo pidió que los comentarios sean respetuosos, civiles y con el sentimiento subyacente de que la opinión de todos es válida y que solo a través del diálogo y al escuchar a alguien más con quien no estemos de acuerdo tendremos la oportunidad de avanzar como personas. ¡Gracias y a salvo!